¿Cómo funciona un seguro de impago de alquiler? Todas las claves

Contratar un seguro de impago de alquiler es una opción cada vez más frecuente por parte de quienes buscan rentabilizar sus bienes de un modo seguro. Si estás pensando en convertirte en arrendador, lo más probable es que analices cada detalle de la operación al milímetro. La principal ventaja de ceder el uso y disfrute de tu inmueble tiene que ver con  la retribución que percibirás por ello. En la misma medida, la amenaza de impagos es algo que suele quitar el sueño a multitud de propietarios que, ya sea por desconocimiento del sector, exceso de confianza o mala fortuna terminan por verse envueltos en una situación desagradable con sus inquilinos.

Las garantías que ofrece un seguro de impago de alquiler trascienden de las meras cuestiones económicas vinculadas a las rentas. Aunque este pueda ser el capítulo que termine de inclinar la balanza hacia su contratación final, disponer de una póliza que propicie un alquiler seguro ofrece otra serie de aspectos nada desdeñables.

¿No tienes claro cómo funciona un seguro de impago de alquiler? En la práctica es una herramienta que protege tu inmueble de manera más efectiva que un aval bancario y completando aspectos que no alcanzan las pólizas de hogar tradicionales. Aquí tienes todas las claves.

El aspecto principal del funcionamiento de todo seguro de impago de alquiler guarda una estrecha relación con las coberturas que ofrece. Como decíamos, el hecho de tener garantizadas las rentas es una de las principales ventajas de este tipo de pólizas aunque no es la única. Por eso, es conveniente analizar cada capítulo para contratar el seguro de impago de alquiler que mejor se adapte a tus necesidades.

Las principales garantías tienen que ver con:

  1. Impago de renta: Si tus inquilinos dejan de pagar, tu seguro de impago se hará cargo de las mensualidades pendientes en base a las condiciones contratadas en tu póliza. Las opciones son de 6, 9 ó 12 meses.
  2. Gastos de cerrajero y cerradura por desahucio: En ocasiones, el escenario puede complicarse hasta el punto de tener que proceder al desahucio de tus arrendatarios. En estos casos, tendrás garantizados los gastos correspondientes de la intervención del cerrajero y cambio de cerradura.
  3. Actos vandálicos: Otro de los escenarios habituales en casos de alquileres difíciles es tener que hacer frente a desperfectos ocasionados por vandalismo. Tu seguro de impago de alquiler asumirá las reparaciones y reclamará los daños a los responsables.
  4. Asesoramiento jurídico telefónico: ¿Tienes dudas sobre tus derechos como propietario o cuestiones relacionadas con tu vivienda? También en este capítulo puede ayudarte un seguro de impago de alquiler.
  5. Defensa jurídica del consumidor: Tus intereses estarán representados por profesionales con amplia experiencia en el sector tanto en el ámbito penal como consumidor, esto es, propietario.

En la práctica, si has de hacer frente a cualquier situación vinculada con estas y otras situaciones relacionadas con tu contrato de alquiler, sólo has de contactar con tu seguro para hacer uso del mismo. Encontrarás el asesoramiento necesario y se encargarán de poner en marcha todos los procedimientos para resolver las situaciones derivadas de un alquiler complicado.

Toda buena historia tiene un principio y un final. En el caso del arrendamiento de una vivienda, el primer paso es contratar un seguro de impago de alquiler. Como decíamos, estudiar cada propuesta hasta despejar todas tus dudas es fundamental para dar con la mejor alternativa. Una vez te hayas decantado por la opción más apropiada, habrás de seguir las indicaciones de tu aseguradora para suscribir el acuerdo entre las partes. Una de los aspectos más interesantes de la póliza de Allianz es la realización de un estudio de viabilidad previa de tus inquilinos. Si tras analizar a los potenciales arrendatarios, resulta positivo, disfrutarás de todas las coberturas ofertadas por una empresa solvente.

Protegida tu vivienda con garantías, siempre que tengas dudas vinculadas con el alquiler de la misma, tendrás a tu disposición un gabinete de expertos que sabrán ofrecerte soluciones en cada caso. Si se trata de impagos, eventuales discrepancias con tus inquilinos que terminen en desperfectos de la vivienda o el inicio de cualquier procedimiento legal para hacer valer tus derechos como propietario, una simple llamada de teléfono servirá para recuperar la tranquilidad. ¿Hablamos?

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